Ella... Ella...un ANGEL al que servi...(Antonia...) Gracias Antonia.
A unos pocos metros de mí nuevo e intempestivo hogar hayado en la costa del Mediterráneo, mí dedo escribió nuestros nombres en una de las cientos de playas que embellecen mi Isla natal...a los pocos segundos de que mi mano acabará de firmar mi declaración de amor, ví como el mar se enfurecía de celos, ví como las olas se embravecian y se alzaban con ansiosa premura...chocaron rabiosamente con nuestros nombres arrebatandolos y haciendolos suyos...
No debí escribirlos en la cambiante y vulnerable arena, porque el mar es poderoso y solo con un chasquido en forma de ola que se arrastra a su voluntad, remece descoloca y engulle lo escrito para enseguida expulsarlo en forma de disléxico garabato ininteligible.
Debí escribirlos en la roca, debí grabarlos en lo alto del desfiladero marítimo,ese desfiladero que amurralla al mar para que así las constantes e incansables olas jamás se lleven nuestros nombres...
No escribí nuestros nombres sobre una base solida ni alta ... los dejé ha merced de la complicidad de la sal, del viento y el agua que se confabularon para borrarnos en unos segundos... mí dedo fue la tiza que quiso crear y firmar algo duradero pero las olas implacables fueron el borrador en la pizarra de mi playa...
Las olas envidiosas y celosas desbarataron con su espuma blanca lo que creí que sería para siempre creí que se grabaría como la huella de un fósil que supera epocas,edades y eras...pero me equivoqué y escribí en la inestable incertidumbre de la maleable arena... Y así desaparecimos tu Y yo...
P.D.
Escribid vuestros nombreS (que es tu identidad) en un peñasco alto ...muy alto ¡¡ Que llegue al cielo!! No los escribas en el suelo arenisco que se deja cambiar constantemente por las borradoras olas llevadas por la voluntad del viento...
Betfague Magdala
FOTO: Betfague Magdala